Con las regulaciones actuales, se ha vuelto imprescindible la inclusión de un teléfono en las cabinas o intercomunicador bidireccional.
De esta manera, se establece un paso adelante significativo en términos de seguridad y comunicación directa.
En el mundo de la arquitectura y la construcción, la innovación y la seguridad son dos aspectos que van de la mano.
Sobre todo cuando hablamos de elementos tan esenciales como los ascensores.
Intercomunicador bidireccional: un requisito de seguridad
La normativa más reciente en la industria de ascensores exige que todas las cabinas estén equipadas con un intercomunicador bidireccional.
Este dispositivo permite una comunicación ininterrumpida con la empresa mantenedora del ascensor, asegurando que, en caso de emergencia, los pasajeros puedan establecer contacto inmediato con alguien que pueda asistirlos.
Este sistema se asemeja en funcionamiento a un terminal telefónico tradicional, pero está específicamente diseñado para situaciones de emergencia dentro de la cabina.
Línea telefónica y centralita GSM: La comunicación garantizada
Para que el intercomunicador funcione eficazmente, es esencial contar con una línea telefónica confiable en las cabinas. Aquí es donde entran en juego dos opciones principales: una línea fija tradicional o una solución más moderna y flexible mediante la instalación de una centralita GSM.
La ventaja principal de optar por una centralita GSM radica en su capacidad de autoverificación.
Cada 72 horas, el sistema realiza automáticamente un test de funcionamiento y envía un informe con los resultados, garantizando así la operatividad constante del sistema de comunicación.
La importancia de la autoverificación
La autoverificación de las centralitas GSM no solo asegura que el sistema de teléfono de cabina esté siempre en óptimas condiciones, sino que también proporciona tranquilidad tanto a los usuarios del ascensor como a los administradores del edificio.
En caso de que se detecte algún fallo durante estos chequeos automáticos, se puede actuar de manera rápida para resolver el problema, minimizando así los riesgos asociados a una posible falta de comunicación en momentos críticos.
Por todo lo expuesto anteriormente, desde Ascensores Inel animamos a la implementación de un teléfono de cabina o intercomunicador bidireccional en los ascensores.
De esta manera, se estará complementado con la tecnología de las centralitas GSM para una comunicación efectiva, representa un avance notable en la seguridad y eficiencia de estos sistemas de transporte vertical.
Asegura una respuesta rápida en situaciones de emergencia y refuerza el compromiso con la seguridad de los pasajeros.
Recordad que la adopción de estas medidas se convierte en un estándar esencial para la industria de la construcción y el diseño de edificios.